Una prueba de glucosa en sangre es la única forma de determinar si su nivel de glucosa en sangre es alto o bajo. Se puede realizar con un glucómetro, que mide la glucosa a partir de una gota de sangre. Según el SBD, los valores ideales son: glucosa en ayunas menor a 100 mg/dL, glucosa dos horas después de las comidas menor a 140 mg/dL y glucosa promedio estimada menor a 154 mg/dL.

La glucosa alta o baja puede tener varias causas, como la dieta, la actividad física, el estrés y los medicamentos. El consumo de alimentos ricos en hidratos de carbono puede aumentar la glucosa en sangre, mientras que el ejercicio físico puede reducirla. El estrés y ciertos medicamentos para la diabetes, como la insulina, también afectan los niveles de glucosa.

Para controlar la glucosa es necesario promover cambios en los hábitos de vida. Esto incluye consumir alimentos ricos en fibra, proteínas y grasas saludables, practicar ejercicio físico regular, controlar el estrés, abstenerse de fumar y moderar el consumo de alcohol. Además, es fundamental seguir los consejos médicos sobre el uso de medicamentos para la diabetes.

No, las aplicaciones de control de glucosa no reemplazan las pruebas de glucosa en sangre. Son complementarios y ayudan con el cuidado diario. Las pruebas de glucosa en sangre son la forma más precisa y confiable de medir la glucosa y se recomiendan varias veces al día o según consejo médico.